lunes, 29 de junio de 2015

¿Microsoft o Windows?

Microsoft o Windows
Dilema a Microsoft

Hoy tengo unas terribles ganas de decirte lo mucho que te extraño.

Escribiré las sensaciones
con los ojos rojos por la pantalla.

Así te escribiré,
en mi sistema operativo.

En hojas de papel de impresora acabarán escondidas
las palabras mágicas invisibles:
control c, control v, control p,
¿construyendo, validando, probando?

Quizás esas palabras acaben
arriba de un extintor del metro
arrullando el insecto que canta y no deja dormir,
tal vez en la basura,
o guardadas en mis tesoros,
tesoros de los que no formarás parte,
porque no puedes jugar
pero a veces sí puedes correr.

A veces me gustaría tanto que leyeras,
pero también que escribieras,
que de verdad sienta que lo estás haciendo,
sea más humano.

Pero seguiré con mis terminales,
windows, el deseo de todo en un click.
microsoft la oficina mundial.

Están ahí y yo acá,
virtualmente, realmente.

Lo único que deseo es acabar las finanzas,
dejar de ver esas malditas tablas,
de escuchar ese sonido de celda errada,
olvidar que odio los cálculos financieros,
esos cálculos donde me tomabas de la mano,
y nos burlábamos de que 
esa estupidez no la utilizaríamos jamás,
olvidar que te llevaste ese pedazo de mí,
donde te ayudé, pero ya tenías otros planes
y solita te trabaste.


Ver hacia la ventana y notar que no hay espacio para todo en esta vida.

Bendito Windows, por qué existes,
Maldito Microsoft qué haríamos sin ti.

Mi mayor temor es hacer estas vainas en una oficina,
y peor aún:

Lejos de ti.





¿Quién dijo que hacer una hoja de cálculo era fácil?